Hace ahora 30 años, el 8 de marzo de 1992, 500 mineros de la Minero Siderúrgica de Ponferrada empezaron una marcha a pie desde Villablino (León) hasta Madrid. Defendían el empleo y el futuro de la comarca. La primera “Marcha Negra”. Hoy, 30 años después, una nueva marcha, en esta ocasión en defensa de la sanidad pública, comenzará el próximo lunes 21 de febrero de 2022.
“La Marcha
Blanca” da continuidad a las luchas por la sanidad en Laciana y El Bierzo. La primera de las etapas partirá de
Villablino el próximo lunes 21 de febrero a las 10:00 horas y terminará en
Palacios del Sil. Así, día a día, descenderán el valle del Sil hasta llegar a Ponferrada
el viernes 25 de febrero.
El PCE de León lanza un mensaje de apoyo a la marcha y anima a la población del “Valle de la libertad” a demostrar el carácter combativo de esta comarca sumándose a la marcha en sus distintas etapas.
El pasado
mes de diciembre de 2021 los médicos y médicas de Atención Primaria de la zona
de salud de Villablino, hacían pública una carta en la que advertían de las
deficiencias de la Sanidad Pública de la zona. No es la primera vez,
posiblemente tampocos la última. Se suma a una larga historia de abandono
sanitario y lucha frente a este.
Hacen falta
más médicos y con un complemento de difícil desempeño que permita que se cubran
las plazas, explica Iván Pastrián, secretario provincial. Apunta que en la
actualidad están prestando sus servicios 10 médicos cuando deberían ser 14.
El PCE, que
se suma al comunicado de IU de León, precisa que “existen carencias de personal
del servicio de salud, con la falta desde hace varios meses de tres médicos que
cubrían los consultorios de Caboalles de Arriba, Villaseca y Palacios del Sil”.
Una zona
envejecida, apuntan, en la que ante la falta de un pediatra se carga todo el
trabajo sobre el único existente. Cuando este está de baja o descansando, los
médicos de familia quienes tienen que asumir esa tarea. “¿Es así como se
fomenta a las parejas jóvenes quedarse en el valle?”, se pregunta Pastrián.
“Hace 30 años se gritaba `Laciana se salva luchando´, hoy esa frase está más
vigente que nunca”, concluye el dirigente comunista, que reivindica servicios
públicos de calidad, más inversión sanitaria y la reindustrialización de la
zona desde el sector público.