martes, 16 de abril de 2024

El Bierzo necesita un Plan

El Bierzo necesita un Plan… y sí, tenemos un plan, pero de verdad. Estamos cansadas de escuchar que no tenemos futuro. Estamos aburridos de ver marchar a nuestras amistades. Estamos agotadas de falsas promesas. No queremos más cierres y despidos en la comarca.

Haciendo lo mismo no podemos encontrar resultados diferentes

Llevamos décadas con Planes Miner, Transiciones Justas, Planes de resilencia, de reindustrialización, de desarrollo agrícola y rural. Todos han hecho lo mismo, regalar nuestro dinero a empresas privadas y enterrar nuestras ilusiones.

Cambiar de rumbo para salvar El Bierzo

Haciendo lo mismo no podemos conseguir resultados diferentes. La pregunta es ¿Existen alternativas? ¿Qué medidas debemos impulsar? Lo primero es reconocer que la iniciativa privada ha fracasado en la reindustrialización de la comarca.

Recuperar el control para asegurar el futuro

El Bierzo creció al calor de empresas industriales punteras. No hay atajos, con pequeñas iniciativas no detendremos la sangría demográfica y de empleo. Nos han dicho que podemos ser la Marbella del Norte… ¿Y porque no la Alemania del sur? Apostamos por una comarca con industria pública y sostenible. Debemos abandonar el mercado para salvar la comarca. Crear un polo público industrial promovido por el Estado.

Orgullo de clase para poner en marcha la comarca

Somos los y las esenciales. Lo hemos demostrado a lo largo de la historia y se puso de manifiesto durante la pandemia. Somos quienes producimos la riqueza social, sin nosotros y nosotras no se mueve ni un solo engranaje del sistema. Quienes levantamos las trapas del comercio y cuidamos a nuestras familias, quienes construimos y enseñamos, quienes conducimos y arreglamos. Tenemos el futuro en nuestras manos

¿Luchamos o seguimos yendo hacia atrás?

En el PCE no nos resignamos, nos organizamos, debatimos y luchamos. Con la inversión pública y la planificación y gestión democrática de la economía, le daremos la vuelta a la situación.

 

El Bierzo tiene futuro… y se construye ¡Luchando!